
Entraba a la habitación y estabas rígida en la cama, no se si por que estabas soñando, te había matado, o alguien te asesino. Salí a la lluvia, con cólera de encontrar la causa de tus ojos pétreos. Raudo en la carretera, reflexione con tristeza, ¿quien pudo haber sido?, ¿por que lo hice? y quizás era mejor regresar, arrepentirme por haberte abandonado, reconocer que te había dado muerte o encontrar al vil hombre que te hizo dormir con los ojos abiertos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario